Cavalli in riva al mare
Giorgio de Chirico
Otra obra maestra de la donación Bilotti; en esta pintura los dos caballos avanzan elegantemente con las melenas al viento y amplias colas onduladas sobre una playa acariciada por la luz del alba o, a lo mejor, por un crepúsculo con tonalidades violeta. La particular atmósfera visionaria de esta pintura está sujeta a dos elementos: el templo sobre el fondo, más espectro que real arquitectura, pintado con pinceladas acuosas con los mismo colores del cielo, y el frontón flotante sobre las aguas quietas, como un recuerdo que aparece del mar de la memoria. La pintura está praticamente reducida solamente a dos tonalidades bañadas de luz, gracias al sabio utilizo del óleo.